Adéntrese en la plaza de toros de Las Ventas de Madrid con su entrada y explore una de las plazas de toros más famosas del mundo mientras escucha una visita con audioguía. La entrada incluye el acceso a todos los puntos clave alrededor de la plaza, desde los callejones detrás del ruedo hasta los asientos donde las audiencias animan. Pose para las fotos junto a la Puerta de Madrid (Puerta Grande), una salida reservada para los toreros victoriosos, y admire los diversos estilos arquitectónicos del edificio.

Adéntrese en la icónica plaza de toros de Madrid con su entrada y empiece a explorar. Recoja la audioguía en la entrada o simplemente camine a su aire. La visita con audioguía dura 45 minutos y los comentarios le explican la historia de la plaza de toros, así como la tradición de los toros, un controvertido deporte que sigue estando profundamente arraigado en la cultura española.

Originalmente, los toros se enfrentaban a hidalgos españoles a caballo, pero tras la prohibición de esto por el rey Felipe V en la década de 1700, los hombres en el terreno decidieron luchar los toros en su lugar. Las corridas de toros (como las que tienen lugar en Las Ventas) se hicieron populares con las masas y se asentó una tradición.

Pasee por los puntos clave dentro del edificio y hará una parada para hacer fotos en la entrada principal. A continuación, visite los tendidos , los cuatro niveles diferentes de asientos que rodean la arena. Pasee a pie por el callejón detrás del ruedo, donde los toreros escapan de los feroces toros, y vea las puertas más significativas de la plaza. La puerta de Madrid ha ganado popularidad entre los turistas, ya que es la puerta de salida reservada a los toreros victoriosos.

Además de visitar los puntos clave dentro de la plaza, también vale la pena admirar la fascinante arquitectura de la plaza de toros. Diseñada en 1931 por el arquitecto español José Espeliú, la plaza cuenta con una hermosa fachada de ladrillo con estilo neoárabe. Observe las intrincadas tejas de cerámica que adornan las paredes de la plaza, así como las vidrieras que sostienen los escudos de cada provincia española.

La entrada le permite dedicar todo el tiempo que quiera en la plaza. Cualquier comida o bebida en el café de las instalaciones corre por su cuenta.